MONTAR EN PONI

La equitación de poni abarca las principales disciplinas que desarrollan los equinos de mayor alzada: salto, adiestramiento, concurso completo de equitación, concurso de silla, etc. El objeto de la equitación de poni es formar niños con caballos a su escala. Un pequeño jinete requiere de un pequeño caballo para iniciarse en el arte de la equitación. En los países líderes en materia de deportes ecuestres, resultaría inimaginable montar a un niño en un caballo grande, por eso inician el aprendizaje eligiendo un poni adecuado al peso y a la altura del jinete, lo que los prepara para etapas futuras.



Un niño de 3 ó 4 años ya puede comenzar a montar en poni. Al contrario de lo que se pueda pensar, no es nada peligroso, debido a la mansedumbre del animal. En esta etapa los pequeños desarrollan una actividad recreativa, en la cual, a través de juegos, irán aprendiendo ciertos conceptos básicos que luego, si les gusta la equitación y desean continuar aprendiendo, podrán aplicar en los caballos grandes.

Los niños comienzan las clases con el profesor caminando al lado del poni, para sostenerlos, evitar cualquier accidente, y mostrándoles algunos ejercicios para aprender a dirigir al caballo. Al cabo de pocas clases ya se encontrarán montando solos. Además, estas primeras clases sirven de toma de contacto del niño con el animal; puede que al principio el niño tenga miedo de acercarse al poni, pero pronto este miedo desaparece, cuando comprueba lo cariñosos, mansos y apacibles que son estos animales. Estas primeras clases sirven para que tanto el niño como el caballo se familiaricen el uno con el otro.

Los ponis son una especie de caballos en miniatura.Tiene su origen en los Shetland y en la versión reducida del pura sangre. Su tamaño no se debe a ninguna a normalidad ni defecto de la especie, no son caballos enanos, son una casta verdadera.



En sus orígenes, sobre los siglos XVII y XVIII, se utilizaban como regalo de animal de compañía para príncipes y princesas. El carácter de este animal, además de ser inteligente y dócil, es incluso más cariñoso y amigable que el de los caballos en general.

Estas características les hacen animales idóneos para relacionarse con las personas, especialmente con niños, ancianos y disminuidos, sobre todo en programas que sirven de terapia.

Por norma general, los ponis son mucho más tranquilos que los caballos de estatura normal.



Referente a aspectos físicos, podemos decir que los ponis no suelen sobrepasar la altura de 1,48 cm. La cabeza suele estar proporcionada con su cuerpo, aunque se han dado casos en que era extremadamente grande.
Tienen un cuello ancho y corto, aunque sin demasiada fuerza.

De las razas de ponis que existen en España, destacamos tres por su importancia: asturcones, poni de gales y poni Shetland.